La Convención sobre los Humedales (Ramsar, Irán, 1971) -- llamada la "Convención de Ramsar" -- es un tratado intergubernamental en el que se consagran los compromisos contraídos por sus países miembros para mantener las características ecológicas de sus Humedales de Importancia Internacional y planificar el "uso racional", o uso sostenible, de todos los humedales situados en sus territorios. A diferencia de las demás convenciones mundiales sobre el medio ambiente, Ramsar no está afiliada al sistema de acuerdos multilaterales sobre el medio ambiente (AMMA) de las Naciones Unidas, pero colabora muy estrechamente con los demás AMMA y es un asociado de pleno derecho entre los tratados y acuerdos del "grupo relacionado con la biodiversidad".
Un vecino de Sollana ve la "incoherencia" de uno de los trámites que se le exige para obtener el permiso de navegación por L'Albufera. Uno de estos requisitos, incorporado recientemente, es certificar que distingue el rojo y el verde, pese a que en el lago valenciano no hay señales ni semáforos que hagan necesario distinguir su color.
SERGIO NAVARRO VALENCIA A partir de ahora, conseguir una autorización para navegar en barca por L'Albufera, llevará un trámite más: el del certificado médico que demuestre que el patrón no tiene problemas de daltonismo. El primer sorprendido con esta medida ha sido un vecino de Sollana, José Fermín Faura, quien con "mucho esfuerzo y dedicación", se compró una embarcación llamada Granotera. Tras conocer la ordenanza reguladora del registro de embarcaciones del lago de L'Albufera, presentó la documentación necesaria. "Me dijeron que todo estaba correcto y que mi permiso se estaba tramitando", explicó.
Todo iba "perfectamente", dice el afectado, hasta el momento en el que el servicio Devesa Albufera del Ayuntamiento de Valencia le comunicó, días más tarde y por teléfono, que la legislación sobre aptitudes psicofísicas había cambiado y necesitaba cumplir con una exigencia añadida: "Me dijeron que debía aportar un certificado médico, avalado por un centro de reconocimiento de conductores, en que se acreditara que sé diferenciar los colores rojo y verde". Faura asegura que no es daltónico, pero rechaza por "abusivo" el requisito. "Lo que más me sorprende de este hecho es que pidan estas pruebas cuando es evidente que no hay ni una sola luz , ni señal, ni mucho menos un semáforo en el lago" que requiera distinguir los colores.
"En L'Albufera, las cosas son diferentes al mar, y si aplican esta norma en un lago es porque han hecho un 'copiar y pegar' de la normativa sin importarles las circunstancias y dándoles igual caiga quien caiga", indica el vecino de Sollana.El lago valenciano es de agua dulce y sin salida directa al mar, "por lo que no deberían aplicarse normas que rigen la navegación marítima". Recuerda que la Ordenanza solo permite navegar durante el día, careciendo L'Albufera de señalización alguna que exija distinguir los dos colores".
Aunque no es su caso, el trámite exigido por el Ayuntamiento de Valencia impide a una persona daltónica disfrutar de la navegación por el lago de L'Albufera "sin ningún motivo que lo justifique".
"Incoherencias" en los trámites
Faura añade al listado de "incoherencias" que en su opinión rigen en el lago que "un título expedido por un organismo oficial para la navegación -el de Patrón de Embarcaciones de Recreo-, con el que se puede navegar con embarcaciones de hasta 12 metros y a 12 millas náuticas, y que también permite la navegación interinsular de Baleares y Canarias, no sirva para poder acreditar aptitudes para la navegación por el lago".
"No se le puede privar a la gente de salir y disfrutar de L'Albufera", afirma el vecino de Sollana, que espera navegar pronto con su Granotera. "Se pueden pedir cosas coherentes, pero no eternizar los trámites ni hacer que estemos siempre pagando, pagando y pagando", indica Faura.
ENS VA A COSTAR, PERÒ AL FINAL ENS ACOSTUMAREM A LES BURRAES.
¿ O NÒ ?
SALUDOS...................GIL
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