Llevan 30 horas metidos en un autobús, recorriendo 1.900 kilómetros a través del desierto más grande del mundo, escoltados por agentes del Frente Polisario y con el único propósito de llegar a un aeropuerto que les saque de Argelia.
LAS PROVINCIAS pudo contactar ayer con una delegación española, entre la que viajan nueve personas procedentes de Mislata y un número desconocido de vecinos de Alzira, que se dirigen a la capital argelina después de que el cierre del espacio aéreo les impidiera el pasado miércoles de madrugada tomar un avión en Tinduf, capital de los campamentos saharauis.
«Estamos exhaustos. Teníamos que haber volado el miércoles a las cuatro de la madrugada camino de Argel. Dos horas antes nos dicen que el espacio aéreo está cerrado por seguridad y nos envían a un hotel», explicó el alcalde de Mislata, Manuel Corredera, que viaja con la delegación junto a otros dos ediles, Ligia Rodrigo y Carlos Jarillo. Aunque las informaciones son muy confusas, parece que el partido de fútbol clasificatorio para el Mundial de Sudáfrica que se jugó el miércoles entre Argelia y Egipto tiene mucho que ver.
«Nos dijeron que el Gobierno había fletado aviones de forma gratuita para que los argelinos pudieran asistir al partido y que estas aeronaves tenían prioridad. Otros creen que hay una amenaza terrorista sobre las instalaciones del aeropuerto», aseguró el alcalde de la localidad.
El hotel al que llevaron a la delegación española, compuesta por una treintena de personas, era «lamentable, lleno de cucarachas y hormigas». Por la mañana, a través de la Embajada de España en Argelia, les hablaron de la posibilidad de que un avión saliera el sábado desde Tinduf. «Hemos preferido recorrer los 1.900 kilómetros hasta Argel y como tiene aeropuerto internacional, salir del país en cualquier avión». A última hora habían conseguido plazas en una aeronave que sale esta tarde a las cuatro con destino a Barcelona.
La delegación, procedente además de Sabadell, Gijón o Getafe, había acudido a unas jornadas sobre la situación del pueblo saharaui en los campamentos de Tinduf. Desde Mislata habían viajado nueve personas: tres concejales, cinco miembros de la asociación Ahuim y una profesora del colegio Santa Cruz. Esta oenegé trabaja desde hace varias décadas defendiendo los derechos del pueblo saharaui con la colaboración del Ayuntamiento. Además, se dedican a trasladar a Valencia niños saharauis que deben ser operados.
Ramiro Montoya, miembro de Ahuim, comentó ayer que estaban todos «bastante agotados», ya que las temperaturas durante el día son elevadas y por la noche se produce un descenso muy acusado. Aseguró además que estaba recibiendo numerosas llamadas que no podía contestar porque la batería del móvil está a punto de agotarse».
ESTO ES UNA "PUTADA" DE LAS GORDAS; ESPEREMOS QUE TODO LES SALGA BIEN.
SALUDOS.........GIL
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